Parque Nacional Galápagos

Guardaparques del Parque Nacional Galápagos repatrian 79 tortugas a la isla Santiago

El Ministerio del Ambiente de Ecuador anunció que 79 tortugas de la especie Chelonoidis Darwini, criadas en cautividad en el Centro de Reproducción y Crianza en Cautiverio de Tortugas Gigantes “Fausto Llerena” de la isla Santa Cruz, fueron repatriadas a la isla Santiago por los guardaparques del Parque Nacional Galápagos. Este proyecto es parte de la Iniciativa de Restauración de la tortuga gigante, cuyo objetivo es reconstruir las devastadas poblaciones de tortugas en el archipiélago.

Galápagos Digital

Isla Santiago marcada por un círculo rojo

Cuando Charles Darwin desembarcó en Santiago en 1835 durante su exploración de Galápagos, se encontró con un grupo de españoles en la isla explotando la población de tortugas como alimento. El propio Darwin comió carne de tortuga aunque dijo que “las jovenes tortugas hacen una sopa excelente pero para mi gusto el sabor de la carne me fue indiferente.”

Los piratas, balleneros, marinos y pescadores que visitaron las islas comenzando en el siglo 17 consideraban a las tortugas como un manjar exquisito. William Dampier, un pirata y explorador británico, escribió que eran “extraordinariamente dulces” mientras que el capitán James Colnett de la Armada Británica las consideraba “el alimento mas delicioso que hemos probado.” Y el capitán de la marina de Estados Unidos David Porter las describió como “superior a cualquier otro alimento.” Antes del siglo 20 aproximadamente 200,000 tortugas fueron capturadas y transportadas vivas en las bodegas de esos barcos como una reserva de carne fresca.

Tras años de esta clase de explotación, además de la introducción de cerdos, cabras y otros animales invasores que devoraron la vegetación de las islas, las tortugas estaban en peligro de extinción.

Cuando el Parque Nacional Galápagos fue establecido en 1959, sólo se encontraron 300 tortugas, en su mayoría machos, en Santiago. El Parque y la Fundación Charles Darwin comenzaron a criar las tortugas en cautiverio mientras trabajaban para erradicar los animales invasores en Santiago y otras islas deshabitadas.

El 19 de abril de 1975, comenzó la repatriación de tortugas a Santiago. Con este último grupo de 79, un total de 1.033 tortugas han retornado a la isla.

Las tortugas recién llegadas tienen entre 3 y 5 años. Para ser elegibles para la repatriación, sus carapachos deben medir al menos 23 centímetros de longitud. El parque informa que se las ha sometido a chequeos veterinarios y cuarentena para asegurarse que están saludables. “Además, se les colocó un chip numerado con el cual se puede identificar a la tortuga en posteriores monitoreos.”

Los funcionarios del Parque calculan que ahora la población total de tortugas en Santiago (incluyendo las que se reprodujeron en cautiverio y las que descienden de las tortugas que quedaron en la isla )  llega a aproximadamente 1500, cinco veces mas que las que existian cuando comenzó el proyecto de salvar a las tortugas de la extinción.